Hemos realizado una revisión del artículo: «Esteatosis pancreática: hallazgo frecuente en población chilena»1 del cual queremos hacer ciertas observaciones.

El título engloba a la población chilena de forma muy general, pues menciona que se escogieron a 203 pacientes de un único hospital, durante un periodo de 2 meses (abril-mayo del año 2015) y sin tener otros estudios recientes del país que se mencionen, resulta ser incorrecto utilizar el término «población chilena» cuando la población estudiada corresponde a un solo hospital de Chile. Se podría haber considerado de forma más exacta, como sugerencia, el título «Pacientes adultos con esteatosis pancreática en el Hospital Clínico Universidad de Chile en los meses de abril y mayo en el año 2015».

Con respecto a la sección de Introducción y Objetivos, se señala como el objetivo primario el conocer la prevalencia de esteatosis pancreática (EP) en pacientes adultos que se realizaron tomografía axial computada abdominal y pélvica. Sin embargo, en la sección de Discusión y Conclusión, el objetivo principal cambia a estudiar la frecuencia de la EP, creando confusión al lector. Además, a fin de clarificar ambos términos, según la Organización Panamericana de la Salud (PAHO, por sus siglas en inglés)2, la frecuencia «en epidemiología se refiere a la aparición de una enfermedad o de otro atributo o hecho en una población, sin hacer distinción entre incidencia y prevalencia» y la prevalencia es «número de personas que tienen una enfermedad en un período de tiempo específico», por tanto, resultan ser conceptos diferentes.

En la sección de Metodología, los autores indican como un criterio de exclusión a menores de 15 años, considerando solo a pacientes mayores de dicha edad. Siendo necesario precisar que la ley chilena vigente3 considera a partir de los 18 años como mayoría de edad, de forma que no se ha considerado correctamente la edad de los pacientes adultos.

El siguiente punto a tratar es la falta de especificación en algunas de las variables presentadas: al enfatizar la correlación entre el IMC y la EP, se debe considerar colocar una clasificación más completa, mencionando los grados de obesidad. Según Sahuquillo et al.4 se realizó un estudio de 100 pacientes, donde el 71% presentaba obesidad (33% de grado 1, 29% de grado 2 y 9% grado 3), considerando que, a mayor grado de obesidad, mayor infiltración de grasa e inflamación en el páncreas, lo que puede conllevar a presentar una mayor resistencia a la insulina, conllevando a un mayor riesgo en la salud del paciente.

Finalmente, en la sección de Resultados se indica la participación de 96 mujeres (47%) en el estudio, pero en la tabla 1 se invierten los números, siendo 107 mujeres y 96 varones, este error de tipeo llega a confundir al lector al no poder determinar la cantidad correcta de mujeres y hombres que se incluyeron en el estudio.