La infección por Helicobacter pylori (H. pylori) es usualmente adquirida en la infancia. En Cuba su estudio en las edades pediátricas es un campo poco explorado. Objetivo: identificar la prevalencia de la infección y los factores asociados en niños de 3 años de edad de La Habana.
Material y métodosSe realizó un estudio epidemiológico transversal analítico con 1,274 niños de 3 años de edad, que aportaron muestra de heces, provenientes de la cohorte de nacimientos de La Habana (HINASIC). Se identificó la infección por H. pylori, utilizando el paquete para determinación de antígeno (Ag) de H. pylori en heces de la casa comercial Spinreact, España. La recolección de datos fue a través de un cuestionario administrado por los investigadores que incluyen variables sociodemográficas, ambientales, estilo de vida e infección por otros parásitos. Se calcularon prevalencias, razón de prevalencia con intervalos de confianza de 95% y regresión logística dicotómica.
ResultadosLa prevalencia de Ag de H. pylori positivo fue de 5%. Dormir acompañado fue el factor de riesgo encontrado RP 1.27 (IC 95%: 1.03-1.50). Consumo de agua de pipa RP 0.16 (IC 95%: 0.04-0.72) y vivir en un núcleo familiar con ambos padres RP 0.94 (IC 95%: 0.85-0.99) fueron factores protectores.
ConclusionesLa prevalencia de infección de H. pylori en la infancia temprana ubica a La Habana internacionalmente en una posición intermedia. Estudios de causalidad e intervenciones futuras deberán ser tenidos en cuenta para el control de la infección.
Helicobacter pylori (H. pylori) infection is usually acquired in childhood. In Cuba, its study in pediatric ages is a little explored field.
AimTo identify the prevalence of the infection and its associated risk factors in 3-year-old children in Havana.
Materials and methodsAn analytic, cross-sectional, epidemiologic analysis was conducted on 1,274 children belonging to the cohort of participants in the Natural History of Wheezing in Cuba study (HINASIC for its Spanish acronym) that were 3 years of age and provided a stool sample. H. pylori infection was identified by determining the H. pylori antigen (Ag) in stool, utilizing the commercial Spinreact kit, from Spain. The data were collected through a questionnaire applied by the researchers that included sociodemographic, environmental, and lifestyle variables, as well as infection from other parasites. Prevalence and the prevalence ratio with a 95% confidence interval were calculated and the dichotomous logistic regression analysis was employed.
ResultsThe prevalence of positive H. pylori Ag was 5%. Sleeping together was the risk factor found (PR:1.27; 95% CI: 1.03-1.50). Protective factors were drinking water from water delivery trucks (PR: 0.16; 95% CI: 0.04-0.72) and living in a nuclear family unit (PR: 0.94; 95% CI: 0.85-0.99).
ConclusionsThe prevalence of H. pylori infection in early childhood places Havana in an intermediate position at the international level. To control the infection, causal studies should be conducted and opportune interventions implemented.
La colonización del estómago por Helicobacter pylori (H. pylori) es la más común de las infecciones bacterianas crónicas en el ser humano1, considerado uno de los principales hallazgos de la gastroenterología y uno de los microorganismos de mayor interés en patología humana2,3. Su origen data de aproximadamente 58,000 años4 y fue entre 1985-89 cuando Warren y Marshall5 asocian la presencia de esta bacteria a la gastritis crónica y la úlcera, desde entonces muchos son los trabajos realizados en este campo, atribuyéndosele la génesis de la gastritis crónica, úlcera duodenal y gástrica en adultos y niños, y el cáncer gástrico, tanto de tipo adenocarcinoma como linfoma tipo MALT (tejido linfoide asociado a mucosas). Una vez adquirida la infección esta persiste y la mayoría de los infectados se mantienen asintomáticos.
Estimaciones sugieren que aproximadamente la mitad de la población mundial se encuentra colonizada por esta bacteria, con una amplia variabilidad entre diferentes poblaciones, posiblemente relacionada con diversos factores como la virulencia del microorganismo, la susceptibilidad del huésped, el uso de antibióticos y condicionantes ambientales como el nivel socioeconómico y de manera menos clara, con factores genéticos, raciales y culturales6,7. La transmisión digestiva es aceptada por todos6. Las prevalencias van desde 1-2% en estudios conducidos en niños asintomáticos en los Países Bajos a más de 90% en Bangladesh6. En países en desarrollo los niños son infectados mayoritariamente antes de los 10 años y el pico más alto de prevalencia en los adultos (80%) se alcanza antes de los 50 años de edad. En países desarrollados los estudios evidencian que raramente la infección se produce antes de los 10 años de edad, el incremento a 10% se produce entre los 18 a 30 años de edad y al 50% por encima de los 60 años8.
En Cuba, el conocimiento de la prevalencia es un campo aún sin explorar, la mayoría de los estudios se han realizado sobre poblaciones pediátricas y adultas con síntomas gastrointestinales. Se ha identificado alta infección por H. pylori en pacientes adultos con úlcera gástrica (91%), duodenal (99%) y gastritis crónica (94%) y una elevada expresión del gen cagA+9–12. En infantes, los trabajos son más escasos, se ha observado relación con la anemia en escolares (79%)13 y en los diagnósticos de la gastritis crónica antral (67.7%)14. La reducción de la incidencia de estas enfermedades obedecerá a la toma oportuna de medidas preventivas para evitar su transmisión lo cual dependerá del conocimiento de la historia de infección por H. pylori, de ahí el objetivo de este trabajo en el que nos proponemos identificar la prevalencia de la infección y los factores socioeconómicos, ambientales y de estilos de vida, asociados en la población pediátrica de 3 años de edad en la provincia La Habana.
Material y métodosPoblación de estudioLos sujetos participantes de este trabajo pertenecen al 3.er año del estudio longitudinal prospectivo de base poblacional, Historia Natural de la Sibilancia en una cohorte de niños de La Habana, Cuba (HINASIC), cuyo objetivo es identificar factores de riesgo que intervienen en el desarrollo del asma. Información detallada sobre diseño metodológico de la cohorte incluyendo selección muestral, criterios de inclusión y exclusión fueron previamente explicados15. Un total de 1,543 niños a los 3 años de edad fueron encuestados entre marzo de 2012 y marzo de 2013, pertenecientes a 17 policlínicos de 4 municipios de La Habana (Arroyo Naranjo, Cerro, Habana del Este, La Lisa) con una selección muestral proporcional a sus tamaños, de ellos 1,274 niños (83%) fueron elegibles para participar en este trabajo al proveer muestra de heces.
Recolección de datosLos datos fueron obtenidos a través de la aplicación de un cuestionario administrado por un entrevistador (pediatras o médicos de familia) a padres o tutores previo consentimiento informado, donde se obtuvieron datos sobre demografía, estilos de vida, el ambiente del hogar y preguntas específicas enfocadas a mediciones antropométricas (peso y talla) al momento de la encuesta. Se obtuvo una muestra de heces la que fue utilizada para el diagnóstico de infección por H. pylori, usando el paquete comercial de Spinreact (http://www.spinreact.com) el que se basa en una prueba cualitativa inmunocromatográfica con sensibilidad de 94% y una especificidad del 95% cuando se compara con un patrón de referencia, según consta en la ficha técnica. El resultado de la prueba es dado en «positivo» (ante la presencia de IgG H. pylori) o «negativo» (ausencia de IgG H. pylori)16. Otra porción de la muestra de heces fue analizada buscando infección por parásitos por método directo con solución de eosin y lugol, y la técnica de concentración de Kato Kats, específica para la identificación y cuantificación de huevos helmintos17.
Análisis de datosLa información se introdujo en una base de datos, limpiada de errores obvios o no plausibles. Todo el análisis estadístico se realizó con Stata v12 (StataCorp, Texas, EE. UU.) usando comandos survey para permitir uso de diseño muestral previsto. Se calcularon estadísticas descriptivas (frecuencias absolutas, porcentajes), además se realizó análisis bivariado usando tablas de contingencia de 2x2, en las cuales se calculó prevalencia de infección y su intervalo de confianza de 95% para cada categoría de exposición de las variables interpretando asociación estadística cuando el intervalo no contuviera la unidad. Las variables significativas y otras plausibles científicamente fueron incluidas en modelación por regresión logística dicotómica, se establece como variable dependiente el resultado de la prueba de H. pylori, se modela la probabilidad de que sea positiva y se obtienen razones de prevalencias y sus intervalos de confianza de 95% ajustados para cada variable de exposición, calculando errores estándares robustos ajustados por municipios. Se consideraron como confusores a priori el sexo y tratamiento antiparasitario pero finalmente no fueron introducidos en el modelo final por no modificar la asociación en un 10% o más.
Consideraciones éticasSe solicitó a los tutores de los pacientes menores de edad, el consentimiento escrito para participar en la investigación descrita. El protocolo del estudio fue aprobado por los Comités Científicos del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología de La Habana y de la Escuela de Medicina de la Universidad de Nottingham, Reino Unido. Los autores declaran que este artículo no contiene información personal que permita identificar a los pacientes.
ResultadosDe los 1,274 niños enrolados en el estudio a los 3 años de edad, el 100% de los padres o tutores completaron correctamente el cuestionario aplicados por los médicos de cabecera. Las características de los participantes del estudio son presentadas en el tabla 1. La prevalencia de infección de H. pylori fue 5%.
Las asociaciones bivariadas con H. pylori son presentadas en la tabla 2. Después del ajuste de factores de confusión, los factores asociados para la infección por H. pylori son presentados en la tabla 3. El factor de riesgo encontrado fue el dormir acompañado (RP 1.27; IC 95%: 1.03-1.50) y los factores protectores, el estado civil casada o viviendo en pareja (RP 0.94; IC 95%: 0.85-0.99) y el consumo de agua de pipa (RP 0.16 (IC 95%: 0.04-0.72).
Análisis bivariado de exposición y riesgo de Ag positivo de H. pylori
Variables | Categorías | Prueba Hp positivo(n=70)n (%**) | Prueba Hp negativo(n=1204)n (%**) | RP (IC 95%) | p |
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Madre con trabajo remunerado | NoSí | 32 (7)38 (5) | 458 (93)746 (95) | 1.34 (0.85-2.13)1 | 0.247 |
Nivel educacional madre | Primaria/ SecundariaPreuniversitarioUniversitario | 21 (6)42 (6)7 (4) | 327 (94)715 (94)162 (96) | 1.46 (0.63-3.36)1.34 (0.61-2.93)1 | 0.3730.461 |
Estado civil de la madre | SolteraCasada/viviendo en pareja Divorciada/separada | 13 (5)48 (5)9 (9) | 254 (95)861 (95)89 (91) | 0.53 (0.23-1.20)0.58 (0.29-1.14)1 | 0.1250.122 |
Ingreso familiar (MN) | <225225-499500-999>=1000 | 8 (11)31 (44)26 (37)5 (7) | 87 (7)535 (44)429 (36)153 (13) | 2.66 (0.90-7.89)1.73 (0.68-4.38)1.81 (0.71-4.62)1 | 0.0670.2370.208 |
Peso para la edad | <10 percentil10-90 percentil> 90 percentil | 2 (4)42 (6)26 (5) | 49 (96)693 (94)462 (95) | 0.69 (0.17-2.75)10.93 (0.58-1.50) | 0.8450.773 |
Talla para edad | <10 percentil10-90 percentil> 90 percentil | 4 (3)57 (6)9 (6) | 118 (97)939 (94)147 (94) | 0.57 (0.21-1.55)11.01 (0.51-1.99) | 0.5290.262 |
Peso para la talla | <10 percentil10-90 percentil> 90 percentil | 3 (3)38 (6)29 (5) | 104 (97)595 (94)505 (95) | 0.47 (0.15-1.49)10.90 (0.57-1.45) | 0.4050.676 |
Presencia de hermanos | NoSí | 22 (5)48 (6) | 415 (95)789 (94) | 11.13 (0.70-1.86) | 0.696 |
Hermanos mayores | NoSí | 37 (6)33 (5) | 623 (94)581 (95) | 10.95 (0.61-1.51) | 0.954 |
Tipo de familia | FuncionalDisfuncional | 57 (5)13 (8) | 1044 (95)160 (92) | 11.45 (0.81-2.59) | 0.283 |
Estado de la vivienda | BuenoRegularMalo | 48 (6)18 (5)4 (5) | 791 (94)343 (95)70 (95) | 10.87 (0.51-1.48)0.94 (0.35-2.55) | 0.6090.911 |
Hacinamiento | NoSí | 45 (5)25 (6) | 794 (95)410 (94) | 11.07 (0.67-1.72) | 0.877 |
Variables | Categorías | Prueba Hp positivo(n=70)n (%**) | Prueba Hp negativo(n=1204)n (%**) | RP (IC 95%) | p |
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Asistencia a círculo infantil o casa de cuidadoras | NoSí | 22 (6)48 (5) | 349 (94)855 (95) | 10.90 (0.55-1.46) | 0.763 |
Duerme acompañado | NoSí | 27 (4)43 (7) | 597 (96)607 (93) | 11.53 (1.00-2.42) | 0.095 |
Tratamiento para otros parásitos | NoSí | 60 (5)10 (10) | 1115 (95)89 (90) | 11.98 (1.05-3.74) | 0.062 |
Tratamiento con antibióticos | NoSí | 26 (6)44 (5) | 406 (94)798 (95) | 10.87 (0.54-1.39) | 0.647 |
Presencia de mascotas | NoSí | 43 (6)27 (5) | 723 (94)481 (95) | 10.95 (0.59-1.51) | 0.918 |
Presencia de perro | NoSí | 51 (6)19 (5) | 811 (94)393 (95) | 10.78 (0.47-1.30) | 0.410 |
Presencia de gato | NoSí | 66 (5)4 (6) | 1144 (95)60 (94) | 11.15 (0.43-3.05) | 1.000 |
Presencia de otros | NoSí | 59 (5)11 (8) | 1080 (95)124 (92) | 11.57 (0.85-2.92) | 0.218 |
Presencia de roedores | NoSí | 55 (6)15 (5) | 926 (94)278 (95) | 10.95 (0.52-1.59) | 0.861 |
Presencia de vectores | NoSí | 47 (5)23 (6) | 831 (95)373 (94) | 11.08 (0.67-1.76) | 0.844 |
Tipo de agua de consumo | EmbotelladaAcueductoCisternaPipa | 4 (12)55 (6)10 (4)1 (2) | 29 (88)910 (94)216 (96)49 (98) | 10.47 (0.17-1.26)0.37 (0.13-0.97)0.17 (0.03-0.69) | 0.1240.0680.059 |
Hierve el agua | NoSí | 8 (3)62 (6) | 224 (97)980 (94) | 1.73 (0.84-3.55)1 | 0.176 |
Variables | Categorías | Prueba Hp positivo(n=70)n (%**) | Prueba Hp negativo(n=1204)n (%**) | RP (IC 95%) | p |
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Hábitos del niño | |||||
Juega con tierra o arena | NoSí | 40 (5)30 (7) | 797 (95)407 (93) | 11.43 (0.91-2.27) | 0.155 |
Come tierra o arena | NoSí | 67 (5)3 (10) | 1177 (95)27 (90) | 11.86 (0.62-5.57) | 0.490 |
Se chupa el dedo | NoSí | 56 (5)14 (7) | 1028 (95)176 (93) | 11.43 (0.81-2.51) | 0.291 |
Se muerde/come las uñas | NoSí | 49 (5)21 (6) | 873 (95)331 (94) | 11.12 (0.68-1.84) | 0.750 |
Camina descalzo en tierra | NoSí | 48 (5)22 (7) | 890 (95)314 (93) | 11.28 (0.76-2.09) | 0.400 |
Se rasca el ano | NoSí | 49 (5)21 (7) | 910 (95)294 (93) | 11.30 (0.80-2.14) | 0.363 |
Lava las manos después de orinar/defecar | NoSí | 18 (7)52 (5) | 252 (93)952 (95) | 10.78 (0.46-1.31) | 0.423 |
Lava las manos antes de ingerir alimentos | NoSí | 7 (5)63 (6) | 130 (95)1074 (94) | 11.08 (0.51-2.32) | 0.991 |
Lava las manos después de jugar con tierra o arena | NoSí | 17 (5)53 (6) | 296 (95)908 (94) | 11.02 (0.60-1.73) | 1.000 |
Otras infecciones parasitarias | |||||
Infección parasitaria | NoSí | 5 (14)65 (5) | 1172 (86)32 (95) | 12.57 (1.10-6.01) | 0.071 |
Helmintiasis | NoSí | 69 (5)1 (20) | 1200 (95)4 (80) | 13.68 (0.63-21.6) | 0.658 |
Protozoarios | NoSí | 4 (13)66 (5) | 1176 (87)28 (95) | 12.35 (0.91-6.06) | 0.171 |
IC95%:intervalo de confianza de 95%; RP:razón de prevalencia.
%*:porcentaje respecto al total de niños (n=1274).
%**:porcentaje respecto al total por categoría de exposición.
Los valores p fueron obtenidos de pruebas de asociación basadas en distribución X2.
Análisis multivariado de exposición y riesgo de Ag positivo por H. pylori
Variables | Categorías | Prueba Helicobacter pylori positiva (n=70) n (%) | OR (IC 95%) para prueba Helicobacter pylori positiva | p |
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Duerme acompañado | NoSí | 27 (38.6)43 (61.4) | 11.27 (1.03-1.50) | 0.027 |
Estado civil de la madre | SolteraCasada/viviendo en parejaDivorciada | 13 (18.5)48 (68.6)9 (12.9) | 0.93 (0.80-1.50)0.94 (0.85-0.99)1 | 0.061 |
Agua de consumo | EmbotelladaAcueductoCisternaPipa | 4 (5.7)55 (78.6)10 (14.3)1 (1.4) | 10.48 (0.16-1.33)0.41 (0.12-1.28)0.16 (0.04-0.72) | 0.002 |
Los valores p fueron obtenidos de pruebas de significación de Wald basadas en distribución X2. Modelo de finitivo:PY=1=1−3.1465+Duerme a companado−0.292*Madre soltera−0.1776*Madre casada+0.1164*AguaAcueducto−0.0535*AguaCisterna−0.9912*AguaPipe
Hasta donde conocemos es el primer estudio de base poblacional para investigar la prevalencia y factores asociados a la infección por H. pylori en una población infantil sana a la edad de 3 años en La Habana, capital de Cuba. Condiciones relacionadas con el ambiente y el estilo de vida explican la prevalencia de infección bacteriana obtenidas en la población de estudio. El análisis transversal realizado a los 3 años de edad de los niños provenientes de una base de datos de la cohorte longitudinal HINASIC fue lo que propició el conocimiento de la magnitud de infección a esta edad, el dormir acompañado un importante factor de riesgo y el estado civil casado o vivir en pareja y consumir agua de pipa los factores protectores encontrados.
Del total de niños encuestados a los 3 años de edad el 83% facilitó la muestra de heces necesarias para la realización de la prueba de H. pylori, lo cual permitió poder estimar la prevalencia de infección. Varias son las fortalezas de este estudio: obtener cuestionarios correctamente confeccionados y realizados por personal médico calificado que vienen siguiendo a los niños desde hace algunos años, respuestas ofrecidas en su mayoría por los padres de los niños (90%) y el utilizar una prueba de H. pylori validada internacionalmente y recomendada para estudios epidemiológicos a estas edades de la vida18. Por otro lado, el llevar a cabo el control de la calidad externa por el personal técnico altamente calificado del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología de Cuba (INHEM) de las determinaciones parasitológicas realizadas en los laboratorios de parasitología de las áreas de salud implicadas es otra fortaleza que garantiza la confiabilidad del resultado del examen de heces. Dos limitaciones del estudio fueron identificadas: no explorar los antecedentes de úlcera o gastritis en los padres o tutores del niño lo cual no pudo ser analizado como un factor asociado y segundo obtener una baja prevalencia de Ag H. pylori lo cual dificultó el análisis de posibles factores asociados. No obstante los resultados son valiosos.
Cuba, país de mediano y bajos recursos, pese a su condición económica y un fuerte bloqueo económico impuesto por EE. UU. por más de 50 años, a diferencia del resto de los países que comparten igual nivel de desarrollo, exhibe indicadores de salud y nivel educacional similar a países del mundo desarrollado, lo que probablemente junto al desarrollo de este trabajo en una zona urbana y el elevado consumo de antibióticos en la población pediátrica sean factores contribuyentes a los resultados obtenidos19–22. La prevalencia obtenida de H. pylori a la edad de 3 años nos ubica en un patrón de prevalencias intermedias en el contexto internacional aunque acercándonos al patrón de países industrializados si se tiene en cuenta que en países de Europa Occidental las prevalencias en la infancia temprana son aproximadamente de 1.2%6. En Latinoamérica en Ecuador, Chile, Brasil y México un porcentaje importante de niños ya están infectados (63%, 25%, 31.1% y 10% respectivamente)21,23–26. En el continente africano estudios realizados por Amberbir et al. reportan una prevalencia de 41% a los 3 años en población etíope y en Uganda 28.7% de los niños en el primer año de edad se encontraban infectados, 46% entre 1 a 2 años y de 51.7% entre los 3 a 5 años27,28. El más reciente metaanálisis conducido por Zabala Torres et al., reporta prevalencia en menores de 6 años de edad de 20% (95% CI: 14%-25%) entre otros resultados29.
El dormir los niños en unión con otras personas fue el factor de riesgo encontrado en este estudio. Independientemente de no haber indagado antecedentes de infección en los adultos que conviven con el niño, altas prevalencias de infección detectada en la población adulta cubana (75-90%)8–12,14 y evidencias de la transmisión de la infección entre parejas podría sugerir un riesgo incrementado de transmisión a los infantes ante la presencia de convivientes infectados24,25,29–32. Se ha determinado que la familia juega un papel fundamental en la transmisión de esta bacteria, sobre todo en los primeros años de vida donde se invoca una transmisión de persona a persona (vía oral-oral) y la causa más probable de esta transmisión son las madres24,29,32.
Todo parece indicar que el vivir en un núcleo familiar estable proporciona una protección a la infección bacteriana. Probablemente una mayor atención a sus hijos sea un factor importante. La presencia de mejores normas de higiene personales y ambientales relacionado con el elevado nivel escolar de la población de estudio podrían ser la explicación plausible. En adición, un mayor uso de antibiótico detectado en este grupo fue relevante, lo que pudo conferir un peso importante en este resultado24,31.
El consumo de agua potable suministrada por pipas fue otro factor que contribuyó en la protección de la infección por H. pylori. El estado técnico de la red pluvial en no todos los lugares de La Habana se presentan en buen estado por lo que, la distribución de agua por los carros cisternas o pipas son necesarios. Pese a la incomodidad que pudiera generar este servicio público todo parece indicar que el no transitar por la red hidráulica le confiere mayor seguridad al evadir la probabilidad de contaminación cruzada ante dificultades estructurales en la misma. Estudios realizados desde el 1997 por Jonson et al. demostraron que la presencia de agua clorada es un factor que inactiva a la bacteria interfiriendo la transmisión hídrica33. Una revisión reciente revalida al agua contaminada como fuente de H. pylori aunque se insiste en la necesidad de profundizar en los estudios sobre la transmisión de origen hídrico34. Eichelberger et al., presentan datos de la asociación entre factores de riesgos ambientales y la infección por H. pylori en
EE. UU. basado en los datos de NHANES, indicando que las exposiciones ambientales (uso incorrecto del agua y el contacto ocupacional con tierra) juegan un rol importante en la transmisión del H. pylori (estimación ajustada de odds ratio [OR] 2.7, 95% CI: 1.3–5.6)35.
Concluyendo, la prevalencia de infección por H. pylori estimada en la infancia temprana ubica a La Habana en una posición intermedia en el contexto internacional. Todo parece indicar que las condiciones socioeconómicas juegan un importante rol en la infección. Intervenciones oportunas deben ser realizadas para la reducción de futuras complicaciones.
FinanciaciónEste trabajo ha sido financiado por la Wellcome Trust (090375); Nottingham University Hospital Charitable Trust; de Nottingham Respiratory Biomedical Research Unit y el Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología, Habana, Cuba.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
AgradecimientosAl Grupo de estudio Historia Natural de la Sibilancia en Cuba (HINASIC) que consta de los siguientes integrantes:
Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y MicrobiologíaSilvia J. Venero-Fernández, Ramón Suárez-Medina, Hermes Fundora-Hernández, Lenina Menocal-Heredia, Yuria Isabel Caraballos-Sánchez, Reina Amelia Quintana, Félix Manuel Rosado-García, Patricia Varona-Pérez, María del Carmen Hinojosa.
Hospital Universitario Pediátrico Docente Centro HabanaRegla N. Rivero, Javier Muñoz-Pérez, Caridad González-Morfa.
Municipio de Arroyo NaranjoEsperanza de la C. Mora-Faife, Damaris Zaldívar-Ricardo, Maritza Diburt-Amita, Gisela Álvarez-Valdez, Anadelis Alfonso-Hernández, Vilma Álvarez-Valdez, Yamilka Magaña-Álvarez, Zoe de los Ángeles Figueroa-Barreto, Nieves Sardiñas-Báez, Jorge Antonio Febles-del-Toro, Yunia Velázquez-Pérez, Manuel Hugo Felpeto-Fuentes, Yordanka Gainza-Bueno, Grisel M. Esquivel-Barrios, Maite Suárez-Paz, Bárbara Judith Magaña-Álvarez, Alida Carménate-Fernández, Roberto Hidalgo-Mederos, Lianet del Loreto, Hidalgo Mederos, Danay Silva, Gretel Comas Fonseca, Dalia M Lazaga Cala, Cristina Odalys, Kessel Díaz, Aliuska Lorenzo Méndez
Municipio de La LisaGladys García-García, María de Lourdes Ortiz-Hernández, María Antonia Betancourt-López, Marlén Batista-Cedeño, Iris Alfonso-Castellanos, Leticia Gómez-García, Ernesto Rafael Gutiérrez-Mendoza, María Luisa Loynaz-González, Nibenia Rodríguez-Trujillo, Yanet Pozo-Herrera, Víctor Manuel Montejo-Guerra, Julia Urbina-Reynaldo, Valentina Gómez-Suliman, Caridad Alicia Rodríguez-Aragón.
Municipio de CerroIleana del Valle-Infante, Claudia Matos-Ramos, Martha Betancourt-Orue, Óscar Alba-Monteagudo, Yuderkis Ferrer-Ceruto, Aída Damas-Martínez, Mercedes Peñalver-Pérez
Municipio de Habana del EsteLiem Gómez-Marrero, Sarahí Castillo-Martínez, Amor de los Ángeles Castaño-Vega, Norberto Torriente-Barzaga, Ileana Ávila-Rodríguez, Magalys Navarro-Ruiz, Kirenia Díaz-Hernández, Iluska de La Torre Suárez, Gilberto Roque-Pereira, Yamilet Corona-Carnero, Idania Gonzalaz-Fernández, Fidelia Romeu-Ravelo, Regla Hernández-Ponce, Teresa Serrano-González, Dulce Romeo-Cepero, Caridad González Leiva, Teresa de Jesús Cobas Espino, Nuris-Fajardo, Midiala Pérez-Arcia, Sarahy Díaz-Araujo, Yanet Medina- Lescay, Sandra Collazo-Rodríguez, Julia Amparo Griñán-Ramos, Teresa Serrano-González, Beatriz Lazo-Vázquez, Tania Pupo-Portal, Nidia Leyva-Porra, Odalys Pacheco-Mesa, Martha Rizo-Ramos, Yaneysi Vallafuerte-Pérez, Aliniuska de La Paz-Arias, Maite B García-Sotolongo, Yusimí Calzado-Herrera, Martha Nidia Rizo-Ramos, Guillermo Verdecia, Mayté B. García-Sotolongo, Juana F. Abreu-Quijano, Fidelia Romeo-Ravelo.
Gracias también a los niños y padres que ofrecieron sus datos y a los directores municipales de Salud Pública y a los trabajadores de laboratorios quienes han permitido el soporte del estudio.